Afectividad Consciente: ¿cómo crear entornos seguros y protectores?

Ninguna persona se siente segura o protegida en un entorno emocionalmente distante y frío. Como adultos/as tenemos el deber de garantizar en todos los espacios de crianza y convivencia un entorno afectivo y cálido para los niños, niñas y adolescentes.  

En este sentido, la Afectividad Consciente es la capacidad que una persona tiene de generar un entorno emocionalmente protector y cálido, y dentro de él establecer relaciones afectivas positivas. Esto se logra de manera consciente, sistemática y cotidiana, cultivándola día a día en todas las relaciones interpersonales. 

Muchas veces la afectividad suele surgir de forma natural en el marco de las relaciones cercanas cuando son relaciones positivas, haciendo sentir a todas las personas seguras y protegidas. Particularmente en un contexto de crianza y educación de un niño, niña o adolescente, esta crianza solo es protectora y garante de sus derechos si es afectiva y cálida. 

La afectividad surge de algunas condiciones personales claves como su integración en la historia de vida personal, los modelos vinculares afectivos positivos, una red afectiva de apoyo y pautas de autocuidado sistemáticas. 

En Aldeas Infantiles SOS asumimos de manera integral el compromiso de crear entornos seguros y protectores en todos los espacios de cuidado. Fomentamos la Afectividad Consciente como una competencia clave en esta construcción: todos los colaboradores y colaboradoras dentro de la organización debemos poseerla para generar espacios donde los participantes de nuestros programas puedan desarrollarse en la plenitud de sus derechos.