21.09.16

Aldeas Infantiles SOS pide el fin de las detenciones de niños refugiados y migrantes

Durante la Cumbre de Alto Nivel de Naciones Unidas sobre Refugiados y Migrantes Aldeas Infantiles SOS instó al cese de las detenciones de niños refugiados y migrantes

En la reunión convocada el pasado 19 de septiembre en Nueva York, la Asamblea General de las Naciones Unidas realizó una reunión de alto nivel para analizar los grandes desplazamientos de refugiados y migrantes, con el fin de unir a los países en torno a una respuesta internacional más humanitaria y coordinada.
 
En el encuentro, los 193 Estados miembros adoptaron compromisos comunes y aprobaron la Declaración de Nueva York, un texto que guiará la acción internacional en materia de refugiados y migrantes durante los próximos años. Actualmente, hay más de 65 millones de personas desplazadas en el mundo, de las cuales 21,3 millones son refugiados. El 51% de los refugiados son niños. 
 
Aldeas Infantiles SOS ha participado activamente en las negociaciones sobre el documento que se aprobó en la cumbre, con el objetivo fundamental de garantizar los derechos de los niños migrantes y refugiados, especialmente de aquellos no acompañados o separados de sus familias. 
 
El cese de las detenciones de niños refugiados y migrantes con motivo de su estatus migratorio o el de sus padres es una de las peticiones principales de la organización. Aunque en palabras del Representante Especial para Asuntos Exteriores de Aldeas Infantiles SOS, Richard Pichler, “finalmente el texto no es tan ambicioso como nos hubiera gustado, ya que permite la detención de los niños como medida de último recurso”
 
“Seguiremos trabajando para conseguir la extinción de esta práctica”, asegura Pichler, que lideró la delegación de Aldeas en la cumbre, ya que, según asevera, “contradice nuestra convicción fundamental de que todos los niños tienen los mismos derechos, independientemente de su condición de asilado o migrante. No se puede cortar por la mitad la Convención de Derechos del Niño y escoger qué derechos se aplican a estos niños y cuáles no”.

Los niños separados de sus familias son los más vulnerables

Aldeas Infantiles SOS defendió en la cumbre el respeto de la legislación internacional en materia de infancia. Los niños solos o separados de sus familias son los más vulnerables y su protección debe asegurarse en todo momento. En palabras de Pichler“los gobiernos deben, por un lado, poner sus esfuerzos en asegurarse de que los niños reciben o tienen acceso a protección, cuidados, integración y educación, tal y como establece la Convención de los Derechos del Niño. En segundo lugar, tienen que hacer todo lo que esté en su mano para reunir a los niños con sus familias, siguiendo las Directrices de Naciones Unidas sobre las modalidades alternativas del cuidado de los niños”.
 
El mensaje de Aldeas Infantiles SOS hizo hincapié en la importancia de buscar soluciones a largo plazo para los niños en contextos migratorios o de refugiados, como la reunificación familiar. Las familias deben recibir los apoyos necesarios para que puedan permanecer unidas en los países de origen, tránsito y destino. Asimismo, se enfatizó en la necesidad de dar voz a los menores, de acuerdo con su edad y estado de madurez, en la toma de decisiones que les conciernan y condicionen su vida.
 
La cumbre y los eventos organizados en paralelo ofrecieron a Aldeas Infantiles SOS la oportunidad de aportar y compartir con gobiernos y socios su experiencia y su saber hacer. Desde que la crisis de los refugiados en Europa se agravase en 2015, Aldeas ha proporcionado ayuda humanitaria en el terreno en al menos 14 países. Más de 1.100 niños sirios no acompañados o separados de sus familias han recibido cuidados en sus centros de atención temporal; 13 Espacios Amigos de los Niños han sido creados para proporcionarles un entorno seguro y protector; se han distribuido miles de paquetes de comida, ropa y artículos de higiene; y se ha facilitado atención psicológica y otros servicios que incluyen información y facilidades para la comunicación a niños refugiados o desplazados y a sus familias.